Damisela Cartas de José Martí a su madre, Doña Leonor Pérez Cabrera.

Cartas de José Martí a su madre, Doña Leonor Pérez Cabrera. Bandera de Cuba.

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José Martí
A su madre, Doña Leonor Pérez Cabrera
Cartas de José Martí

Algunas de las cartas que José Martí envió a su madre, Doña Leonor Pérez Cabrera.


Y ya que se debe comenzar por el principio, comenzamos con la carta que Martí a los nueve años de edad envió a Doña Leonor cuando acompañaba a su padre en la zona de los que ahora Jagüey Grande. Se estima ésta sea la primera carta de Martí.




Hanábana y Octubre 23 de 1862.


Estimada mamá: Deseo antes de todo que Vd. este buena lo mismo que las niñas, Joaquina, Luisa y mamá Joaquina. Papá recibió la carta de Vd. con fecha 21, pues el correo el sábado que era 18 no vino, y el martes fue cuando la recibió; el correo -según dice el- no pudo pasar por el río titulado "Sabanilla" que entorpece el paso para la "Nueva Bermeja" y lo mismo para aquí, papá no siente nada de la caída, lo que tiene es una picazón que desde que se acuesta hasta que se levanta no le deja pegar los ojos, y ya hace tres noches que está así.


Yo todo mi cuidado se pone en cuidar mucho mi caballo y engordarlo como un puerco cebón, ahora lo estoy enseñando a caminar enfrenado para que marche bonito, todas las tardes lo monto y paseo en él, cada día cría más brío. Todavía tengo otra cosa en que entretenerme y pasar el tiempo, la cosa que le digo es, un "Gallo fino" que me ha regalado Dn. Lucas de Sotolongo, es muy bonito y papá lo cuida mucho, ahora papá anda buscando quien le corte la cresta y me lo arregle para pelearlo este año, y dice que es un gallo que vale más de dos onzas.


Tanto el río que cruza por la "finca" de Dn. Jaime como el de la "Sabanilla" por el cual tiene que pasar el correo, estaban el sábado sumamente crecidos, llegó el de acá a la cerca de Dn. Domingo, pero ya han bajado mucho.


Y no teniéndole otra cosa que decirle dele espresiones a mamá Joaquina, Joaquina y Luisa y las niñas y a Pilar dele un besito y Vd. recíbalas de su obediente hijo que le quiere con delirio.


José Martí



La siguiente carta no tine el año en la fecha. Sin lugar a dudas éste sería 1869. Fue encarlelado el 21 de octubre de 1869 y juzgado el 4 de marzo de 1870.




10 de Nvbre.


Madre mía:


Hace dos días que escribí a V. con un francés que viene a ver a los Domínguez, no el que fue allá, y me ha dicho que no ha podido llevar la carta. Me prometió llevarla. Dígame si va.


Anteayer también escribí a V.; pero no he tenido con quien mandar las cartas y no quiero que pasen en la cantina por la puerta. -Como escribo a V. hoy rompo la carta de antier.


Ayer estuvo aquí el Fiscal y me preguntó con bastante interés por mi causa y su estado. Le dije lo que sabía; pero es muy extraño esto de que el que me ha de juzgar tenga que preguntarme porqué estoy preso. -Según me ha dicho, alguien le ha hablado de mí. -Los Domínguez y Sellén saldrán al fin en libertad, y yo me quedaré encerrado. Los resultados de la prisión me espantan muy poco; pero yo no sufro estar preso mucho tiempo. Y esto es lo único que pido. Que se ande aprisa, que al que nada hizo nada le han de hacer. A lo menos, de nada me podrán culpar que yo no pueda deshacer.


Mucho siento estar metido entre rejas; -pero de mucho me sirve mi prisión. -Bastantes lecciones me ha dado para mi vida, que auguro que ha de ser corta, y no las dejaré de aprovechar. -Tengo 16 años, y muchos viejos me han dicho que parezco un viejo. Y algo tienen razón; -porque si tengo en toda su fuerza el atolondramiento y la efervescencia de mis pocos años, tengo en cambio un corazón tan chico como herido. -Es verdad que V. padece mucho; -pero también lo es que yo padezco más. ¡Dios quiera que en medio de mi felicidad pueda yo algún día contarle los tropiezos de mi vida!


Estoy preso, y esta es una verdad de Pero Grullo, pero nada me hace falta, sino es de cuando en cuando 2 o 3 rs. para tomar café; -pero hoy es la primera vez que me sucede. -Sin embargo cuando se pasa uno sin ver a su familia ni a ninguno de los que quiere, bien puede pasar un día sin tomar café. -Papá me dio 5 o 6 rs. el Lunes. -Dí 2 o 3 de limosna y presté 2.


Tráiganme el Domingo a alguna de las chiquitas.


Esta es una fea escuela; porque aunque vienen mujeres decentes, no faltan algunas que no lo son. -Tan no faltan, que la visita de 4 es diaria. A Dios gracias el cuerpo de las mujeres se hizo para mí de piedra. -Su alma es lo inmensamente grande, y si la tienen fea, bien pueden irse a brindar a otro lado sus hermosuras. -Todo conseguirá la Cárcel menos hacerme variar de opinión en este asunto.


En la Cárcel no he escrito ni un verso. -En parte me alegra, porque ya V. sabe cómo son y cómo serán los versos que yo escriba.


Aquí todos me hablan del Sr. Mendive, y esto me alegra. -Mándeme libros de versos y uno grande que se llama "El Museo Universal". -Dele su bendición a su hijo.


Pepe




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Última Revisión: 1 de Septiembre del 2007
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