Salen el 24 de abril del campamento Los Ciguatos camino al de La Yuraguana.

Abril 24.-Por el cañadón, por el monte de Acosta, por el roncaral de piedra roída, con sus pozos de agua limpia en que bebe el sinsonte y su cama de hojas secas, halamos, de sol a sol, el camino fatigoso. Se siente el peligro. Desde el Palenque nos van siguiendo de cerca las huellas. Por aquí pueden caer los indios de Garrido. Nos asimos en el portal de Valentía, mayoral del ingenio Santa Cecilia. Al Juan Fuerte, de buena dentadura, que sale a darnos la mano tibia; cuando su tío Luis lo llama al cercado:- "Y tú, ¿por que no vienes?" "¿Pero no ve como me come el bicho?" El bicho -la familia- ¡Ah, hombres alquilados. -salario corruptor! Distinto, el hombre propio, el hombre de sí mismo. ¿Y esta gente? ¿que tiene que abandonar? ¿La casa de yaguas, que les da el campo, y hacen con sus manos? ¿Los puercos, que pueden criar en el monte? Comer, lo da la tierra; calzado, la yagua y la majagua: medicina, las yerbas y cortezas; dulce, la miel de abejas. -Más adelante, abriendo hoyos para la cerca, el viejo barbón y barrigudo, sucia la camiseta y el pantalón a los tobillos y el color terroso y los ojos viboreznos y encogidos: -¿Y ustedes que hacen? "Pues aquí estamos haciendo estas cercas".- Luis maldice y levanta el brazo grande por el aire. -Se va a anchos pasos, temblándole la barba.

Rafael Lubian y Arias en “Martí en los Campos de Cuba Libre” publicado en 1953, nos presenta datos de lo ocurrido el 24 de abril, del campamento de La Yuraguana y lo ocurrido el siguiente día:

“"La Yaraguana" es una hermosísima finca cuya casa vivienda se levanta a 50 metros de la orilla del río "Yateras". Aquí hacen un alto los expedicionarios para descansar de la fatigosa jornada anterior llena de peligros, pues les vienen siguiendo las huellas desde cerca del "Palenque", y, además en esta zona operan las guerrillas de indios de Garrido que tanto daño hicieron.”

Continúa Rafael Lubian y Arias:

“Amanecen el día 25 en este campamento y bien temprano emprenden nuevamente la marcha. Este recorrido lo comienzan por una mala vereda que conduce a "Arroyo Esteban" y a "La Tinaja" en la sierra del "Makey" desde cuya altura se divisa perfectamente la hermosa bahía de Guantánamo. En "La Tinaja" empieza el descenso de la sierra hasta llegar al llano de Guantánamo para seguir la marcha por un buen camino que pasa por las colonias "San Antonio" y "Santa Cecilia" y los caminos al "Socorro", "Makey", "Arroyo Fangoso" y "Arroyo Salado", hasta "Arroyo Hondo".

“A las once de la mañana y cerca de Arroyo Hondo sienten los expedicionarios un tiroteo. Es que se está efectuando un combate entre las fuerzas cubanas mandadas por José Maceo y las tropas españolas. Recio es el combate en que triunfaron las tropas cubanas. Este se llevó a cabo precisamente en "Arroyo Hondo", y cuando en el año 1922 visitamos este lugar aun quedaba una cabezada del puente sobre el cual se libró recia lucha, la que extrajimos y enviamos al "Museo Martí", donde se conserva. En este combate murió Arcil Duvergié.

“Después de reunirse los expedicionarios a las fuerzas de Maceo y de proveerse de caballos -los quitados a la Guardia Civil- comienzan desde allí su recorrido a caballo. Continuaron la marcha pasando por los caseríos del "Makey", "Santa Rita", "Platanal", "Las Lajas", "La Laguna" y el río "Jatibo" hasta llegar a "Malabé" después de haber caminado gran parte del recorrido ya de noche. Aquí José Maceo le regala a Martí un caballo bayo, claro, de crines rubias, que montará hasta su muerte.

“De la Yuraguana a Malabé los expedicionarios anduvieron 37 Kms. y 205 Mts.

“Hasta Arroyo Hondo los expedicionarios habían recorrido toda esta ruta a pie, habiendo caminado hasta ese lugar 161 kilómetros 138 metros.”