Damisela Vida de José Martí - Año 1877.

Vida de José Martí - Año 1877. Bandera de Cuba.

José Martí
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José Martí
Breve cronología
1877

María García Granados, La Niña de Guatemala.
María García Granados
La Niña de Guatemala
¡la frente que más he amado en mi vida!

1876 - Martí en México!


José Martí conoce a La Niña de Guatemala
y se casa con Carmen Zayas Bazán - Año 1877

Enero 2 -

Martí se embarca en Veracruz rumbo a Cuba (Carta de José Martí a Manuel Mercado del 1º de Enero de 1877).


Enero 6 -

Llega a La Habana.


- - -

En Cuba recibe recomendaciones del padre de Fermín Valdés Domínguez, quien era guatemalteco, para varias personas en Guatemala, entre otras el Presidente José Rufino Barrios quien había sido discípulo del señor Valdés Domínguez.


Febrero 24 -

Vuelve a México.


Marzo 1 -

En Mérida, México, es presentado entre la colonia cubana allí residiendo.


Marzo 26 -

Llega a Guatemala.


Abril -

Fue nombrado Catedrático de Literatura Francesa, Inglesa, Italiana y Alemana y de Historia de la Filosofía en la Escuela Normal Central. A cargo de este centro escolar se encontraba el cubano exiliado José María Izaguirre, quien era uno de los patriotas bayameses que se unieron a Carlos Manuel de Céspedes. Se vio obligado a exiliarse y optó por ir a Guatemala, donde el gobierno de José Rufino Barrios le dio oportunidad de instruir a la juventud guatemalteca.


• José María Izaguirre en “Martí en Guatemala” originalmente en “Cuba y América” de 1899, reproducido en “Homenaje a José Martí en el Centenario de su Nacimiento” de la “Revista Cubana”, Publicaciones del Ministerio de Educación, Dirección General de Cultura, La Habana, Cuba, 1953. Páginas 332-342:


...“Corría el año 1877.


“Era yo director de la Escuela Normal de Guatemala por contrato celebrado en New York con el ilustrado guatemalteco señor Francisco Sainfiesta, en representación del general Justo Rufino Barrios, Presidente de esa república.


“Desde que fundé dicho establecimiento tuve el propósito de elevarlo a la mayor altura que fuese posible. Contaba para ello con los útiles consejos de mi condiscípulo y amigo el inolvidable pedagogo cubano Luis Felipe Mantilla, con la cooperación de los profesores más distinguidos de Guatemala y con la ayuda material del Gobierno, que accedió gustoso a cuantos gastos y medios le propuse para lograr aquel objeto.


“El Secretario de Instrucción Pública, que lo era entonces el notable estadista señor Marco Aurelio Soto, me dijo un día: "La Escuela Normal tiene muchos enemigos por hallarse situada en un edificio que perteneció a la congregación de los Padres Paulinos; aquí hay muchos fanáticos: todos ellos son enemigos de ese establecimiento, y es necesario hacerlo simpático, si queremos que no decaiga: a usted corresponde ejecutarlo."”...


• Continúa José María Izaguirre refiriéndose a los esfuerzos por darle buen nombre y popularidad a la escuela:


...“Por otro lado, la excelencia de los profesores, los buenos métodos que se establecieron, las condiciones de los alumnos en lo relativo a edad, inteligencia, conducta y aplicación al estudio; el numeroso y apropiado material de enseñanza con que se contaba, el interés que a todos animaba en obsequio del establecimiento, unidos a las simpatías dispensadas por el bello sexo, dieron a aquél tanto auge y crédito, que no sólo era conocido en la América Central sino que los extranjeros que visitaban la República se hacían un deber de visitar también la Escuela Normal.


“Su buen nombre llegó, sin duda, hasta México, pues un día se me presentó un joven procedente de esa república solicitando plaza de profesor. Su porte era decente, su exterior simpático, y su manera de expresarse fácil y agradable. Me cayó bien. Le pregunté quién era y cuáles eran sus aptitudes para -el magisterio, a lo cual me respondió:


“-Soy cubano, vengo de México y me llamo José Martí. Mis aptitudes para el magisterio...


“-¡José Martí! -le interrumpí yo-. Ese nombre no me es desconocido: lo he visto como el del autor de un folleto en que se habla de los martirios que el gobierno español hace sufrir a los pobres cubanos que manda a los presidios de África. Acaso...


“-Sí, señor, yo soy el autor de ese folleto y el mártir a quien el mismo se refiere.


“-Pues bien, señor Martí, su doble merecimiento de cubano y mártir le hacen acreedor a toda mi simpatía: cuenta usted con la colocación que solicita.


“-Señor, debo ser franco ante todo: para aceptar su generosa oferta he de hacerle presente que estoy comprometido a casarme en México con una joven cubana. La ceremonia se verificará dentro de algunos meses, y yo no podré realizarla si usted no me concede uno para ir a México con tal objeto: le prometo que mi tardanza no traspasará ese límite.


“-Bien está, señor Martí: queda concedido el mes que usted desea. Sírvase recordármelo cuando llegue la oportunidad.


“Habiéndome dicho que las clases que más le agradaría desempeñar eran las de historia y de literatura, le asigné esta última, añadiéndole los ejercicios de composición, vacantes en aquellos días por renuncia del profesor que los tenía a su cargo.


“Desde la primera lección se granjeó la benevolencia de sus alumnos, benevolencia que después se convirtió en cariño para dar paso más tarde a la admiración y al entusiasmo.”...


- - -

Da clases en la Universidad de Guatemala.


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Colabora en la “Revista de la Universidad”.


Junio -

Enseña en la Academia de Niñas de Centro América donde conoce a María García Granados, La Niña de Guatemala.


• José María Izaguirre nos provee información de la relación entre María García Granados, “La Niña de Guatemala”, y José Martí:


...“Entre las familias más entusiastas por él se contaba la del general Miguel García Granados, distinguido por su valor, ilustración y patriotismo, y por haber libertado a su patria de la teocracia en que la tuvieron sumergida por largo tiempo los fanáticos gobiernos de los presidentes Carrera y Cerna. La familia del general García Granados era numerosa y se hacía notar por su cultura y amabilidad; presentado Martí a ella, fue recibido cordialmente, y pronto llegó a ser uno de sus amigos más adictos.


“Entre las hijas del General había una llamada María, que se distinguía de sus hermanas como la rosa se distingue de las otras flores. Era alta, esbelta y airosa: su cabello negro como el ébano, abundante, crespo y suave como la seda; su rostro, sin ser soberanamente bello, era dulce y simpático; sus ojos profundamente negros y melancólicos, velados por pestañas largas y crespas, revelaban una exquisita sensibilidad. Su voz era apacible y armoniosa, y sus maneras tan afables, que no era posible tratarla sin amarla. Tocaba el piano admirablemente, y cuando su mano resbalaba con cierto abandono por el teclado sabía sacar de él notas que parecían salir de su alma y que pasaban a impresionar el alma de sus oyentes.


“Tenía veinte años de edad, y hasta entonces había permanecido insensible a los tiros del amor. Su familia era su encanto y a ella consagraba los tiernos afectos de su corazón. Sin embargo, desde que Martí frecuentaba la casa, se notó en ella cierta tristeza que nadie se explicaba, así como el silencio en que se encerraba delante de el. Era evidente que algo pasaba en su interior; pero ese algo nadie se lo explicaba y quizás ella misma ignoraba la causa de lo que le pasaba.


“Lo que sí sabía ella era que cuando veía a Martí experimentaba un deleite supremo y que cuando él estaba ausente su tristeza aumentaba, su ansiedad de verlo era mayor y no cesaban estos tormentos hasta que él se hallaba de nuevo en su presencia.


“Este sentimiento, desconocido para ella, fue creciendo de día en día hasta tomar los caracteres de una verdadera pasión, y aunque ella lo disimulaba por el recato propio de una joven educada en el amor a la honra, bien comprendió Martí lo que le pasaba. Caballero ante todo, y ligado por igual sentimiento a otra mujer a quien había jurado ser su esposo, se abstuvo de fomentar con sus galanterías o con demostraciones de afecto aquella pasión que parecía próxima a tomar las proporciones de un incendio. Su papel se limitó desde entonces a tratarla simplemente como amigo, y fue separándose de la nasa poco a poco para que María comprendiese que no debía entregarse al sentimiento que la dominaba, pues por más que él reconociese sus merecimientos, como los reconocía, y que simpatizase con ella, no podría corresponder a su pasión.”...


Julio -

Pronuncia un discurso sobre la oratoria en la velada literaria que celebra la Escuela Normal.


• José María Izaguirre en la cita ya mencionada:


...“He dicho que uno de los medios que me propuse emplear para dar crédito y simpatías a la Escuela Normal era el establecimiento de reuniones lírico-literarias. Éstas se llevaron a cabo con mucho éxito, proponiéndome no sólo aquel objeto, sino emplearlas como estímulo para los alumnos y como medio de educación social para los mismos. En ellas se daban conferencias científicas ante un concurso de ambos sexos regularmente numeroso y escogido, se tocaba, se cantaba, se recitaba, se declamaba, pareciéndose en cierto modo a las reuniones familiares que en un tiempo se celebraban en el Liceo artístico y literario de La Habana, cuando era su director el ilustre patriota Ramón Pintó.


“En una de esas noches tocó hablar a los elocuentes oradores guatemaltecos Martín Barrundia y Lorenzo Montúfar, ambos Secretarios de Despacho del Gobierno de Barrios, y el último notable historiador. Sus discursos fueron muy aplaudidos, habiendo versado el de Montúfar sobre la inteligencia de los animales, en que, con abundante copia de hechos históricos y de razonamientos pretendió probar la verdad de su tema.


“Hallábase presente Martí, y, después de oír los discursos anteriores, me pidió permiso para decir algunas palabras. Confieso que se lo concedí con temor, pues aunque yo le reconocía como un joven ilustrado, discreto y de palabra fácil, ignoraba los puntos que calzaba en materias de oratoria. Pero mi temor duró poco, pues sus primeras palabras fueron recibidas con agrado por la escogida concurrencia, y, cuando terminó su discurso, fue aplaudido de un modo excepcional. Habló sobre la literatura en relación con la política. El asunto era escabroso en un gobierno tan suspicaz como el de Barrios, pero Martí lo revistió de tales formas y supo orillar las dificultades de tal modo, que los más entusiastas en aplaudirle fueron los secretarios mencionados.


“El público quedó completamente satisfecho. El discurso de Martí fue el gran acontecimiento de la noche, y el nombre del orador voló desde entonces por toda Guatemala en alas de la fama como tribuno insigne, aunque sólo contaba en esa fecha veintitrés años de edad. Un caballero lo confirmó con el apodo de Doctor Torrente, porque, en efecto, Martí parecía en sus discursos un torrente que se despeñaba, y el elocuente y sabio abogado Salvador Falla dijo de el estas palabras: "Martí, como los bosques nuevos y frondosos, tiene mucha hojarasca en lo que dice; pero su imaginación es fecunda, maravillosa su facilidad para expresarse, y cuando el tenga más edad y haya moderado su ardor oratorio, habrá adquirido más experiencia y reflexión, y la hojarasca se convertirá en sazonados frutos de exquisito sabor."”...


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Es nombrado Presidente de la Sociedad Literaria El Porvenir.


Noviembre 27 -

Martí se embarca rumbo a México.


Diciembre 20 -

Se casa con Carmen Zayas Bazán e Hidalgo en la parroquia del Sagrario Metropolitano de México.


Diciembre 26 -

Con Carmen Zayas Bazán sale de ciudad México rumbo a Acapulco para continuar a Guatemala.


1878 - José Martí regresa a Guatemala, y Cuba!


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Última Revisión: 1 de Octubre del 2007
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